
La enfermedad es un mensaje que el cuerpo nos manda para ayudarnos a tomar conciencia de una forma de pensar o sentir que nos está perjudicando. La medicina tradicional sigue creyendo que la enfermedad es un obstáculo para la felicidad del ser humano, por ello lucha contra ella, tapando los síntomas sin atacar su causa profunda no orgánica.

Sin embargo, enfocado desde otra óptica la enfermedad es más bien un regalo, una ayuda que nos puede permitir equilibrar nuestro Ser. El cuerpo físico no es la causa de las enfermedades. Por sí mismo no puede hacer nada, pues la vida que lo mantiene viene del alma, del espíritu. El cuerpo es simplemente el reflejo de los que sucede en el interior de nuestro verdadero Ser.